Los sitios por donde habitan los cazadores en como podria decirlo, se alla en todas partes, adonde menos se lo imagine, alli está vuestro cazador esperandolos. A veces los bosques son impenetrables, pero la luz hace maravillas, allí donde se cuela un poco de luz, pasa un cazador, donde nadie se imagina, alli se esconde un cazador. El problema de la cuestion es que tenemos dobles, los dobles de los cazadores. Ellos se copian a si mismos, se presentan al mundo como grandes transformadores del arte-caza.Su objetivo es gritar y luego ya no se esconden como antes,muestran sus pechos brillantes de superheroes y dicen a voz en cuello, „somos los mejores“!!!! Todo lo demas no existe somos como el firmamento inconmensurables...... Ya he hablado una ves o mejor dicho ya he escrito una vez de los disfrazados, de los reproducidos, de los impresentables que ocupan todo el paisaje, si! ellos no pueden entrar por las luces de los bosques, no se pueden colar por esas rendijas de luz para mirar-cazar-amar, porque son ellos los que ansian ser mirados. Yo no, yo prefiero con mi único ojo ver-cazar-amar a mis personajes, como éste que ahora se los presento „el hombre de los techos“.